~ "𝑫𝑶𝑳𝑳𝑯𝑶𝑼𝑺𝑬" ~ ─── 𝘿𝙧𝙖𝙘𝙤 𝙈𝙖𝙡𝙛𝙤𝙮 [𝑯𝒐𝒖𝒔𝒆𝒔; 1.0] - (+18)

ℭ𝔬𝔲𝔭𝔩𝔢

     FREYA GRINDELWALD

— El Yulleball es unos pocos días.— Hécate me avisaba mientras caminaba a mi lado amarrándose el cabello improvisadamente.

— ¿Y qué carajos es el Yulleball? — Río por mi sutileza.

— Cierto, faltaste a clases. Es un baile que se hace cada torneo de magos, sirve como veneración para los campeones. Prácticamente es un baile dedicado a ti Freya, ventajas de campeona, ya sabes.

Asentí quitándole importancia, en las escuelas Muggle's también solían hacer una de esas cada año. Claro, no porque hubiera un torneo en el cual tuviéramos que arriesgar nuestras vidas, pero era algo parecido. En lo personal no lo disfrutaba, siempre terminaba en una tonta pelea de infidelidad entre una parejita estereotipada, y todos los años ponían una ridícula corona de plástico sobre mi cabeza, llamándome la reina del baile, solía tirarla al salir.

— ¿Con quién iras? Supongo que las invitaciones deben de estar cayéndote del cielo.

— No, y no lo se. No es algo que me interese, posiblemente ni siquiera asista, tengo que alistarme para el torneo y no tengo tiempo para pensar en esas co-...— Habíamos entrado a el comedor y en mi sitio se encontraba una gran caja al igual que en los lugares de mis hermanos.

Frey comenzaba a abrir el suyo, me acerque a paso rápido con curiosidad a averiguar lo que era.

Un lindo traje completamente negro descansaba en la caja.

— Esa no es una túnica de fiesta normal... — Hécate opino mientras miraba a Frey con detenimiento.

Mi gemelo rio con amabilidad — Es un traje Muggle, Gucci. Mi padre conoce al dueño.

— Interesante... Muy interesante. — La chica le sonrió antes de que yo me interpusiera en medio de ellos.

— Si, es interesante. — Dije con seriedad — ¿Y para qué necesitarías un traje?

—El Yulleball, papá quiere que asistamos así que es lo que haremos. — Erlik llegó por atrás con mi caja entre sus manos. —Ábrela— Pidió, sin muchas ganas le obedecí.

Abrí la caja encontrándome con un vestido negro de seda y tul. Lo saque de la caja para apreciarlo de mejor manera. La parte de atrás era larga, el tul adornaba el suelo ahora, y en este descansaban pequeñas piedras verdes oscuras, justo como el tono que representaba mi casa. En la caja todavía se encontraban un par de tacones negros, comunes pero elegantes.

— Papá dijo algo sobre la representación de nuestra casa, todas las piezas combinan monocromáticamente.

Frey hablo —Eso explicaría porque hay una serpiente bordada en mi traje.

Erlik respondió — La mía también lleva una.

—¿Y porque mi vestido no tiene una? Me suena a favoritismo. — Fingí un quejido.

Hécate me interrumpió. — De hecho, Eya, mira la espalda. — Voltee la pieza encontrando lo que quería. La espalda tenía una serpiente en esta, cruzando una pequeña abertura que dejaría ver mi piel.

El encanto revoloteo en mi pecho, el vestido era perfecto. Era toda mi actitud hecha una pieza de alta costura, pero mi decisión seguía en pie. — Interesante, pero no pienso ir.

— No está en discusión Freya. — Erlik miraba su costoso traje dentro de la caja. — Si papá lo dice, lo hacemos ¿Recuerdas?

Bufe guardando el vestido en la caja, no iba a hacer más discusión porque de un modo u otro iba a perder. Lo que Perseo decía, se hacía. Aquí y en cualquier parte del mundo.