capitulo 13: Meyer "celoso" King

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Mientras Alessia y Francia servían los alimentos la chica intentaba disimular su alegría y emoción, tal vez sea porque Meyer ya había aceptado sus sentimientos hacia ella, o que el plan de tratar a todos bien para que la aceptaran estaba funcionando, pero apenas Francia le ofreció comer con ellos fue como dar un enorme paso en el lugar, podía vislumbrar la aceptación de todos más cerca y finalmente se sentía cómoda con todos, ignoraba las miradas condescendientes que le lanzaba Dalis de un momento a otro y trataba de no ruborizarse cada vez que notaba la penetrante mirada de Meyer sobre ella, quitando esos momentos, para ella el almuerzo era perfecto.

La Jaula estaba nuevamente abierta y como si nada hubiera sucedido el lugar estaba a reventar, Meyer observaba desde la barra las personas entrar y salir de su lugar con emoción disimulada, cuando el bar pasó a ser suyo tuvo miedo de que por cambio de dueño la clientela bajara, pero para su sorpresa no fue así, al parecer las personas iban por el buen ambiente que a pesar de todo les brindaba La Jaula, en cambio en La Jungla cada cinco minutos una persona se te acercaba ofreciéndote drogas y las cervezas costaban el doble de su valor comercial, eso era un beneficio para ellos.

A lo lejos observó un rostro conocido, dejando a Alessia completamente sola en la barra caminó entre la multitud, Daniel May se colocó de pie y lo saludó con una sonrisa y un abrazo, su antiguo entrenador había llegado a visitar después de enterarse de la muerte de Jackson.

—¿Cuándo pensabas anunciarme lo de la muerte de mi mejor peleador? —le preguntó el hombre recibiendo una cerveza de Dalis.

—Lo siento, apenas si he tenido tiempo de hacerlo —le admitió Meyer tomando un sorbo de su botella—. Han pasado demasiadas cosas.

—¿Esa es Alessia?

Meyer dirigió su mirada hacia la barra, en donde Alessia trataba de servir botellas con un ritmo constante.

—¿Acaso se te olvidó como se ve?

Daniel comenzó a reír.

—¿Todavía te trae loco o ya lo superaste?

—No me jodas.

—¡Aún te trae loco! ¡Dios mío Meyer! ¿Y ella te corresponde o qué?

Meyer estaba a punto de contestar cuando levantó la mirada nuevamente, un hombre estaba intentando sacarle conversación a Alessia siguiéndola por toda la barra mientras ella trataba de despachar cervezas, en un momento el hombre logró agarrar a Alessia de la mano y ella rápidamente se sacudió, sin responder nada se colocó de pie y se dirigió a la barra bajo la atenta mirada de Daniel.

—Entonces muñeca ¿No me darás tu número de teléfono? —le preguntó el hombre con insistencia.

Pero Alessia no respondió, observó con confusión a Meyer ingresando a la barra, la obligó a soltar las botellas de cerveza colocándolas sobre la barra, la atrajo agarrándola de la cintura y sostuvo el rostro de Alessia del mentón con una de sus manos para plantarle un posesivo beso frente a todos, varios alaridos se escuchaban a medida que él movía sus labios al compás de los de ella, cuando se separaron él la miró con el ceño fruncido.

—Vas a tener que utilizar una blusa que diga "propiedad de Meyer" —le murmuro de mal humor.

—¿Era necesario el espectáculo? —le preguntó ella avergonzada.

Meyer soltó una risa sarcástica.

—Si, era necesario, así dejo claro que eres mía y lo que es mío no se toca.

—Meyer basta, estas actuando como un paranoico.

—¡Las cervezas! —gritó Dalis con desesperación.

en las manos de Meyer KingDonde viven las historias. Descúbrelo ahora