El Rarito De Los Park

¡Hyung!

Al parecer se necesitaban de 7 adultos para cuidar un bebé, según Jungkook.

Quiere mucho a sus hyung's, pero que le hayan pedido cargar al bebé del hermano de SeokJin era algo extremista.

-¡P-pero...!

-¡Es como cuando cargas tus computadoras caras!

-¿Con cuidado?

-¡Si!.

Aún no entendía porque, entre los 2 omegas y el beta disponible, él debía cargar al bebé.
No se enojen con él, no tiene complejos de "alfa" machista, pero es que en realidad tiene miedo de que el pequeño se le resbale de las manos.
Puede que ya tenga 1 año, pero se sigue viendo pequeño y frágil. Da miedo pensar en que pasaría si este de le cayera.

Decide sentarse con el bebé en brazos, pero el pequeño rápidamente comienza a lloriquear y eso hace que se desespere al no saber que hacer.
Busca ayuda, pero todos estan ocupados instalando los plasticos protectores en las esquinas de los muebles o bajando los juguetes del pequeño.
Incluso Taehyung está ocupado armando la pequeña cunita en la sala de los Park.

-¡Hyung's!.-grita desesperado, confundido de porque el bebé sigue llorando, pero sus gritos asustaron al cachorro y ahora su llanto se a incrementado al doble.
Esta desesperado y hasta él quiere llorar, pero no va a darle la satisfacción a un bebé de que haya sido el causante de sus lágrimas desesperadas.

Para su suerte aparece Hoseok de la cocina, con un biberon en manos y un plato con papilla para bebé.

-Tiene hambre Jungkook, alimentalo.- le dice malicioso, entregandole ambas cosas para que pueda darle comida.

El alfa mira los objetos con terror, pues en su vida a alimentado a un cachorro y no tiene idea de que va primero o si el biberon y la papilla deben alternarse.

Al parecer su novio puede leer sus expresiones faciales, pues con sutileza le señala la papilla para que comienze a darsela primero.

Sin embargo, a omitido un paso importante...

El babero.

Ahora el traje del cachorrito esta lleno de sustancia anaranjada viscosa, y no encuentra un lugar donde esconderse para que Jin no le arranque los cabellos.

-¡Jungkook, tenias el babero frente a tus ojos!.- le grita el omega, señalando con dramatismo el pedazo de tela y todo el desastre que a echo en el sillón.

-¿Por qué le grit- Oh, ya veo porqué.- Jimin se interpone entre los gritos, viendo como el sillón favorito de su madre está lleno de manchas.

¿Su madre le cobrará los 23 mil dolares que cuesta el sillón a Jungkook?

Espera que no, pues no lo a echo con la intención.

-No se cuidar bebés.- confieza apenado, reuyendo de las miradas de sus seis amigos frente a él.

Namjoon parece ser su segundo salvador de hoy, pues a tomado al bebé de sus brazos y, sin importarle que su camisa blanca se ensucie, lo recuesta en su pecho para darle palmaditas en la espalda.

Le pide a Jin silenciosamente la pañalera y el biberón, sentandose en otro sillón con una toalla sobre sus piernas.

Ahora el bebé mantiene su vista fija en el alfa que le carga y quién muy delicadamente limpia su cara con una toallita húmeda.

-Ven Jungkook, y tú también Yoongi.-señala a ambos, recibiendo una mirada confundida de parte del pálido Alfa.

-¿Yo por qué?.- contraataca Yoongi, acercandose de todos modos.