ARRANGED MARRIAGE | YEONGYU |

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''Nunca había visto un ramen tan caro''

Beomgyu buscaba en los cajones de la cocina los ingredientes necesarios para hacer un ramen. Sus mejillas continuaban rojizas después de escuchar las palabras que susurró Yeonjun.

''Gracias, si se que mis pestañas son bonitas''

Rápidamente, movió su cabeza intentando borrar esos pensamientos.

— Maldito jefe con pestañas bonitas. — empezó a hablar. — Quien lo manda a enfermarse.

Movió la olla fijándose que nada se quemara, pasado uno segundos, comenzó a echar algunos vegetales.

— Encima de ser su secretario, ahora tengo que cocinarle. Ja, que gracioso. — puso una mueca de desagradado.

Echó un poco de condimentos, pero sin sobrepasarse. Recordó cuando hace unos meses en la cafetería despidió sin piedad a uno de los cocineros que echó un poco mas de sal de lo debido. Fue triste pero las reglas son reglas y se deben de cumplir a pie de la letra.

— Solo espero que recuerde mi tercera condición, en serio quiero ese viaje a Ámsterdam, me lo merezco por estar soportándolo todos estos años. — Gruño moviendo la cuchara dentro de la olla.

— ¿Por qué a Ámsterdam y no a París, Beomgyunie? — una voz ronca se escuchó cerca del lugar.

Beomgyu se atoró y por poco bota la olla llena de ramen al piso. Por suerte, pudo controlarlo a tiempo.

— Mr Choi, digo, Yeonjun, estabas aquí. — Soltó una risita nerviosa.

Yeonjun estaba con los brazos cruzados y sentado en la mesa muy cerca de donde estaba Beomgyu. Se encontraba con unos pantalones largos de pijama y una bata que lo tapaba de pies a cabeza.

— Alguien se estaba demorando mucho así que decidí bajar. — Respondió naturalmente, evadiendo la pregunta anterior que hizo. Beomgyu se sintió tranquilo.

— Recién acababa de pasar cinco minutos. — respondió Beomgyu, sirviendo la comida.

— Lo quería en cuatro minutos en mi habitación. — Respondió tajante.

El rubio suspiro sin darle tanta importancia.

— Bueno aquí esta, iré a mi habitación, tengo que preparar unos papeles para mañana.

— Ya te dije que esta semana no trabajaras, tenemos que preparar los planes de la boda. — saboreó el ramen. — Nada mal.

— Hablando de eso. — Recordó Beomgyu. — Creo que no invitaste a mis amigos a la boda.

— ¿Qué amigos?

— Taehyun y HueningKai, trabajo con ellos.

— Ya cerré las invitaciones, no invitare a nadie más. — respondió Yeonjun.

— Son mis amigos.

— No sabía que tenías amigos.

Beomgyu lo fulminó con la mirada y Yeonjun no entendía por qué. Se levantó de la mesa donde estaban sentados y se dirigió a su habitación.

— ¡Oye! — gritó Yeonjun pero este hizo caso omiso.

A la mañana siguiente, Beomgyu despertó con ganas de hacer muchas actividades. Extrañaba la rutina de ir a trabajar todos los días, así que decidió continuar, pero desde su casa, además de hacer unos ejercicios para cuidar su figura. Dispuesto a cambiarse, abrió su closet y notó 3 bolsas gigantes de color negro de la marca Chanel.