37.- No eres mi tipo

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En cuanto a los dos días que pasaron desde la presentación del dios Eros, en la isla donde los dos campista se encontraban, casi no podía verse igual a como estaba antes de su presencia. Había árboles caídos, la mayoría de los frutos arrancados de sus lugares de origen, el sol quemaba mucho más de lo normal e incluso el agua era peligrosa cuando la hija de Hécate estaba cerca.

Intentando evitar el sol todo lo que podía, ella se encontraba ideando un plan para atrapar al hijo de Apolo, gracias a él cada vez que se dejaba tocar por la luz solar, se terminaba quemando. Si no fuera por las muchas plantas curativas que encontró, posiblemente tendría todo los brazos llenos de llagas o cicatrices. Consideraba muy cobarde lo que Will había hecho, solo para evitar que ella se le acercara.

Por eso razón, ahora intentaba acercarse aprovechando que ya casi el sol estaba por irse y había más sombras, la chica consiguió llegar hacía donde Solace estaba alerta, la esperaba pero ella desde donde estaba podía lanzarle hechizos y eso hizo.

El hijo de Apolo salió volando hasta chocarse con un árbol, cayó a la tierra y ella aprovecha para lanzarle una lanza improvisada, por suerte él consiguió esquivarla, tomó algo de la fuerza del sol que le quedaba y le envió rayos solares haciendo que retrocediera a esconderse. Tenía salvajes ganas de vencerla, peor con la herida que le había ocasionado el golpe tendría que buscar un sitio seguro donde descansar y examinarla. Antes de eso, encontró una rama que consiguió lanzarle en el brazo, la escuchó gritar y fue su señal para salir corriendo hacía una de las colinas donde podría esconderse.

Y así, otra terrible noche comenzaba a asomarse mientras el sol se ocultaba, sentado en medio de la cueva que había encontrado, la razón comenzaba a iluminarlo junto con los recuerdos de todo lo que había pasado en esos dos días. El pánico se apodero de él por un segundo, había atacado a _____ más de una vez en esos días y aunque ella también lo había hecho, sabía que ninguno estaba mentalmente consciente de eso hasta que el sol se ocultaba.

Por más que la odiará y ella a él, sus auras nunca había estado tan rabiosas y sedientas de sangre, esto le había hecho reaccionar un poco, pensar como él Will que antes era. Empezaba a preguntarse en qué momento se había convertido en alguien tan arrogante y ahora peligroso. No era el mismo, al menos no desde que la guerra con Gaia acabó, no podía culpar a Eros o ____ de eso, él tenía la culpa por dejarse llevar con respecto al egocentrismo, pero todo lo demás había surgido cuando conocía a la chica, no es que ahora la culpara puesto que él también le hacía sentirse igual a ella, más deseaba no haber tenido que llegar a esto si tan solo se hubiera comportado con más humildad él día en que menospreció el trabajo de su hermana.

Al otro lado de la isla, la hija de Hécate estaba pasando por lo mismo, si ambos compartían algo ahora, era la maldita sensación de ser unos monstruos entre ellos. Tan pronto como anochecía, la culpa los comía vivos, ella nunca pensó llegar a tanto. Pero, tal cual le pasaba a Will, cuando lo veía recordaba todo, no solo las ofensas sobre su madre, pues eso debería hacer querer matarlo, no, lo que provocaban o aumentaba esa sensación, era el hecho de recordar las veces en las que Nico lo prefirió, o al menos, pasaba tiempo con él e incluso el beso que le dio. Siendo ella misma podía controlarse, pero con lo que sea que Eros hiciera, ella solo descargaba su irá en el día, queriendo matarlo.

Respiró un par de veces intentando alejar todo, tenía que ser fuerte, Eros los había dejado a su suerte, pero sabía que si no aprendía a controlar sus instintos por la mañana, podría cometer algo de lo que se arrepentiría para siempre, y sobre todo, alejaría a Nico de ella. Nico…había intentado pensar en él para poder mantener algo de cordura en ella durante el día, más no había funcionado, tan pronto veía a Will toda su cordura se esfumaba y comenzaban otra batalla a muerte. Por más que echara de menos al chico de cabellos negros, tenía que evitar pensar en él, era lo mejor estando en ese lugar, debía olvidar que sentía algo por él, o sino, sus instintos acabarían por dominarla tan pronto el sol saliera.

Oscuridad entre Luz y Magia (Nico di Angelo)✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora