Scar Tissue [2T-Brave] (EN PAUSA)

Capítulo 5.

Capítulo 5.

*Irene

Después de eso, me había quedado algo impactada. Vale. No entendía nada. Pero lo que sí que entendía era que como llegara tarde me iban a echar del trabajo al primer día. Y eso no me parecía para nada bien.

Abro rápidamente la puerta, cerrándola detrás de mí al entrar. Anne y Stephen trabajaban hoy, así que estaba sola en casa. Me voy quitando rápidamente el vestido, mientras subo las escaleras.

Sabía que Clara había cogido mi bolso. Sí, lo sabía porque si no lo tenía yo ella era la única que lo había tocado anoche.

Enciendo el grifo de la ducha nada más acabar de desvestirme, y me meto dentro. Apenas tardo diez minutos en acabar y rápidamente me seco. Cepillándome el pelo y corriendo hacia mi habitación.

Me visto corriendo mientras me pongo los zapatos y cojo el teléfono inalámbrico con mi mano izquierda. Marco el número de clara, que me contesta a los tres pitidos.

-¡Clara! -Exclamo- ¿Tienes mi bolso? -Pregunto, y escucho un gemido de fondo. Seguido de un gruñido-

-Joder Irene vaya horas... -Su voz está ronca, y escucho otra voz más grave de fondo, hablándole a Clara- Es Irene... -Dice, seguidamente la voz para de hablar- Sí, sí que lo tengo. Te lo llevo a casa si quieres cuando me levante y eso.

-¿Puedes llevármelo al trabajo? -Digo, acabando de vestirme y comenzando a bajar las escaleras- Llego tarde.

-Claro, te lo llevo. Suerte y un besito. -Dice, y cuelgo-

Salgo de la casa nada más finalizar la llamada, corriendo hacia el fondo de la calle. Vale, tenía cinco minutos para llegar, y diez eran los que normalmente solía tardar en ir hasta allí.

Tenía que correr y darme prisa, o si no me llevaría una buena bronca. O quién sabe, teniendo esos jefes...

Corro hacia la pastelería, esquivando a la gente que se cruza por el medio. ¿La gente no entendía que había sitios especiales para pasear a sus queridos perros y no dejar sus excrementos en medio de la calle?

Porque había estado a punto de pisar unos cuantos.

Justo voy a girar la esquina de la calle de la pastelería, cuando noto como alguien hace lo mismo. Y me estampo contra la persona, soltando un grito y notando algo frío sobre mi pecho.

Abro la boca extremadamente, viendo como mi camiseta negra comienza a mancharse de algo cremoso. Elevo la vista, viendo al culpable de esto. Y mi boca se cierra al instante al ver al hijo del jefe delante de mí. Con los ojos extremadamente abiertos.

-Joder... ¿Irene, no? -Pregunta, dejando la caja de cupcakes destrozados en el suelo. Agacho la vista hacia mi pecho, viendo como está totalmente manchado- Lo siento...de verdad.

Aguanto la respiración diez segundos. Relajándome interiormente.

Vamos Irene cálmate, es el hijo de tu jefe. Te van a dar trabajo. Te van a dar dinero. Y cuando lo consigas vas a poder dejar este trabajo. Venga Irene. Controla tu furia.

Noto como hace el intento de apartar un trozo de magdalena de mi pecho, y me separo de él.

¿Encima tenía la cara de tocarme las tetas? No gracias.

-Bueno, en cierto modo esto compensa lo de ayer. -Dice, guiñándome un ojo segundos después y sacando un pañuelo de su bolsillo- No se nos da nada mal esto de chocarnos en todos lados y tirarnos cosas a la cara. -Dice con sorna, y frunzo el ceño interiormente mientras cojo el pañuelo que me tiende-