25. La otra mitad del verano ll

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Capitulo dedicado a jazmena13 , feliz cumpleaños, linda:3 También es cumpleaños de una de mis mejores amigas, espero que esté donde esté, se la esté pasando muy bien. 

Disfruten la lectura.

Para cuando terminamos de comer y limpiamos la cocina y el comedor -y le dije a Lily que Dylan le enviaba saludos -, se les ocurrió jugar volleybol. 

-Paso -dije, sabiendo que para jugar las chicas me obligarían a quitarme la camisa que llevaba encima y me cubría las pechugas. 

-No seas así -se quejó Lily, con el balón de volleybol abrazado con su brazo. -¡Mujeres contra hombres, venga!

-Vamosss -Melisa me jaló de un brazo.

-¿No deberíamos esperar a que nos baje la comida? -pregunté, para ganar tiempo. 

-No, eso es para meterte a la piscina -me dijo Jamie, pasando a un lado de mí, cargando con la red. En la arena, Seth y Gabriel cavaban hoyos para poner los tubos de volley, que habían estado guardados en el garage. Me pregunté qué otras cosas estarían ocultas ahí. -Además, jugaremos mientras se nos baja y después meternos al mar. Vamos, Jenna. O... ¿no te gusta perder? -me retó con la mirada. 

Eso fue suficiente para provocar a mi yo competitivo. 

-Tú lo has querido -le dije a Jamie, estirando los brazos. Entre todos, cavamos y acomodamos los tubos de la manera más resistente y recta y Seth y Jamie pusieron la red. 

-¿Listos para perder? -les gritó Lily a los chicos desde atrás, antes de sacar. 

-Creo que esas deberían ser ustedes -dijo Gabriel, frente a la red, en posición paralela a mí, con las manos en la cadera. Por suerte para todos, nos habíamos untado el protector solar, en especial Liz, Gabriel y Louis, que eran los que tenían la piel más delgada y sensible. 

Al final no había podido evitar quitarme la camisa, con los ojos puestos en el balón eso ya poco me importaba. Es más, me parecía graciosa la mirada de Seth que se esforzaba por no quedárseme viendo. Me costaba concentrarme con su torso desnudo y el sol pegándole de lado, iluminando la mitad de él como si fuera un dios. 

Todos los chicos se habían quitado la camisa y solo tenían su traje de baño puesto, y para el alivio de nosotras, todos vestían bermudas, unas más cortas que otras, pero bonitas bermudas después de todo. 

Y las chicas, por supuesto, orgullosas en sus bikinis. Yo un poco incómoda, pero se me evaporaba el sentimiento cuando recordaba que todas las chicas vestían igual que yo. 

Lily alzó la pelota y le pegó con todas sus ganas. El juego estuvo reñido puesto que todos éramos buenos, a excepción de Liz, la que menos experiencia tenía jugando volleybol. 

Los chicos eran los que más se evantaban por la pelota, pero al mismo tiempo los mejores clavándola. Me golpeé en la cabeza dos veces, seguido de las risas de todos, Jamie casi se estrella contra el poste, y Seth llegó a colgarse de la red accidentalmente.  

Ganaron los hombres, quince a doce. Después cambiamos de equipos, algo más equitativos; dos hombres y dos mujeres en cada uno. Yo me fui donde habían estado los hombres anteriormente, junto con Liz, Seth y Louis. 

Parecíamos no tener descanso, tan concentrados y juguetones que nos habíamos olvidado que el agua existía. Lo único que hacían los hombres para refrescarse era mojarse la cabeza en el mar. 

Lily golpeó la pelota tan fuerte que salió disprada demasiado lejos, y Seth y yo, que cubríamos la reta guardia, corrimos el mismo tiempo por ella. 

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